En Vallegarcia, han incorporado Cariñena a la mezcla, consiguiendo un vino afrutado y carnoso, con taninos sedosos y gran intensidad aromática, con notas a frutos rojos y negros, cassis y toques especiados. La Garnacha, que aporta especias, frutos rojos y alcohol a la mezcla, es una de las variedades más plantadas en la viticultura mundial, con capacidad de producir vinos redondos y amables, con gran intensidad aromática y buena capacidad de crianza. Cariñena es una variedad que, en suelos pedregosos, es capaz de expresar todo su potencial de manera óptima. Es ligeramente rústica, con un perfil aromático menos frutal, y muy resistente a las altas temperaturas La uva Monastrell cuenta con una amplia dispersión mediterránea, ya que necesita temperaturas medias elevadas para conseguir una buena maduración.
Se adapta muy bien en podas cortas en espaldera, y aporta taninos, color y longitud al vino. Syrah, con su estructura y fruta oscura, es una variedad muy francesa y es el pilar del Valle del Ródano. En la añada 2019 empieza el ciclo vegetativo con una primavera algo más húmeda de lo habitual lo que favorece la brotación de los viñedos. El verano se desarrolla con normalidad, con alguna tormenta dispersa que no afecta a la normal evolución del viñedo. Las variedades se vendimian en su punto óptimo, con una sanidad de las uvas magnífica y unos niveles de azúcar óptimos. Una vez vendimiadas, las uvas fermentan en depósito de acero inoxidable y la mezcla se realiza en Noviembre de 2019, envejeciendo en barricas nuevas de roble francés durante 12 meses. El vino descansa en botella un año antes de salir al mercado. El resultado es un vino con una gran intensidad aromática y estructura en boca, lo que hace que esta añada sea para recordar por su calidad.

Tipo: Tinto

Añada: 2019

D.O.: Vinos de la Tierra de Castilla

Bodega: Bodegas Pago de Vallegarcía

Uva: Garnacha, Cariñena

Graduacion: 14,5% vol.

Maridaje: Asados, carnes rojas, embutidos

Temperatura de servicio: 17º

Capacidad: 75 cl.